LA ESCLAVA
Me vendieron a mi señor
Sin un goce de amor,
Mil esclavas me servieron
Y pusieron
Rico alfareme en mi sien;
Pero yo siempre lloraba,
Y esclamaba
Con voz triste en el harén;
De qué sirve a mi belleza
La riqueza,
Pompa, honor y majestade,
Si en poder de adusto moro
Gimo y lloro
Mi perdida libertad?