TODOS LOS DÍAS

TODOS LOS DÍAS (PARTE I)

Todos los días encuentro fuerzas

¡En ti, Ó Dios amado, que eres lleno de amor!

Todos los días encuentro un dulce aliento

¡En ti, mi mestre Jesús, hacia superar todo mi dolor!

Todos los días una nueva esperanza

Surge en mi corazón pesado y lloroso.

A veces una respuesta para mis preguntas

Alegra mi alma en un momento lluvioso.

Todos los días quiero en paz alabarte

Y demonstrarte una profunda gratitud

Por salvarme del abismo de la desesperación

Cuando aún yo no sentía la luz de tu plenitud.

Todos los días me levanto en preces...

Al despertar en sueños hermosos

Sé que puedo vivir más que triunfante

Y un día pasar por camiños gloriosos.

Todos los días yo soy testigo

De tu misericordia por mi vida animada

En la contemplación de tu formidable creación

Llena de colores para toda alma enamorada.

TODOS LOS DÍAS (PARTE II)

¡Tu eres, Ó padre que estás en los cielos,

El radioso sol de las maravillosas bendiciones

A calientarme todos los días del frío

De las más terribles desilusiones!

¡Tu eres, Ó creador de todas las cosas,

La dulce sombra que me refresca del calor!

¡Y todos los días eres una estrella

Alumbrando mi oscuridad con su resplandor!

¡Tu eres, Ó Dios todopoderoso e sublime,

Mi camiño seguro para vivir un sueño de libertad!

¡Tu eres, además, mi fuente inagotable de amor

A brillar todos los días y para toda la eternidad!

Alessandro Nogueira
Enviado por Alessandro Nogueira em 05/10/2019
Reeditado em 11/04/2020
Código do texto: T6761729
Classificação de conteúdo: seguro
Copyright © 2019. Todos os direitos reservados.
Você não pode copiar, exibir, distribuir, executar, criar obras derivadas nem fazer uso comercial desta obra sem a devida permissão do autor.